Reproductive Justice is Deeply Intertwined in the Fight for Farmworker Justice

FOR IMMEDIATE RELEASE / PARA PUBLICACION INMEDIATA : June 29, 2022

CONTACT / CONTACTO : Yamiles Nunez, Social Media and Communications Specialist, yamiles.nunez@campesinasunite.org

Reproductive Justice is Deeply Intertwined in the Fight for Farmworker Justice

On Friday, June 24th, the Supreme Court of the United States dealt a devastating blow to reproductive freedom when it issued its decision in Dobbs v. Jackson, overturning Roe v. Wade. For 50 years Roe v. Wade ensured a constitutional, federally-protected right to abortion. Many individual states are now erecting insurmountable barrier laws that will add to the challenges that farmworker women already face concerning accessing healthcare, including a lack of financial means and culturally-appropriate services.

Black and Latinx women, particularly farmworkers, will suffer disproportionately from the impact of Dobbs v. Jackson. Generally, women of color have less access to quality healthcare. In the event of seeking an abortion, bereft of the choice and access in their own state, many will be forced to pay exorbitant out-of-pocket costs and travel long distances out of state to access abortion providers. Additionally, some will seek abortion services from unethical providers, putting their lives at risk.

Farmworker women are constantly threatened with gender-based violence in the fields in which they harvest the food that ends up on America’s dinner tables. They are therefore vulnerable to suffering not only the trauma of sexual assault, but the dire consequence of unwanted pregnancy.

“Forcing farmworker women to carry unwanted pregnancies is cruel and a violation of their human and civil rights. Farmworker women have to fight for their bodily autonomy everyday in and outside the workplace. This decision adds to the barriers already in place that prevent farmworker women from accessing reproductive healthcare” said Mily Treviño-Sauceda, Executive Director of Alianza Nacional de Campesinas.

Trigger laws have already gone into effect in states like Kentucky, Louisiana, and South Dakota.  According to these trigger laws, upon the nullification of Roe v Wade, clinics that perform abortions must immediately stop. In some states, such as Kentucky, there are no exceptions for rape or incest.  Further, 13 other states are poised to outlaw abortion.  

Everyone is entitled to choose what they do with their own bodies.  Everyone deserves to have access to affordable reproductive healthcare.  Alianza Nacional de Campesinas defends, and will continue to passionately advocate for, reproductive and healthcare justice. We call on the Biden-Harris administration to immediately act to uphold and protect reproductive freedom and on Congress to codify Roe into law. Reproductive rights and access to care that is culturally relevant and trauma informed are still out of reach for undocumented women,   immigrant and migrant Campesinas.


La Justicia Reproductiva está Profundamente Entrelazada en la Lucha por la Justicia de lxs Campesinxs

El viernes 24 de junio, la Corte Suprema de los Estados Unidos dio un golpe devastador a la libertad reproductiva cuando emitió su decisión en Dobbs v. Jackson, anulando Roe v. Wade. Durante 50 años, Roe v. Wade garantizó el derecho constitucional al aborto protegido por el gobierno federal. Muchos estados individuales ahora están erigiendo leyes de barrera insuperables que se sumarán a los desafíos que las campesinas ya enfrentan con respecto al acceso a la atención médica, incluyendo la falta de medios financieros y servicios culturalmente apropiados.

Las mujeres negras y latinx, en particular las campesinas, sufrirán de manera desproporcionada el impacto de Dobbs v. Jackson. En general, las mujeres de color tienen menos acceso a atención médica de calidad. En el caso de buscar un aborto, desprovistas de opciones y acceso en su propio estado, muchxs se verán obligadxs a pagar costos de bolsillo exorbitantes y viajar largas distancias fuera del estado para acceder a proveedores de aborto. Además, algunxs buscarán servicios de aborto de proveedores poco éticos, poniendo en riesgo sus vidas.

Las campesinas están constantemente amenazadas con violencia de género en los campos en que cosechan los alimentos que terminan en las mesas de familias en este pais. Por lo tanto, son vulnerables a sufrir no solo el trauma de la agresión sexual, sino también las terribles consecuencias de un embarazo no deseado.

“Obligar a campesinas a tener embarazos no deseados es cruel y una violación de sus derechos humanos y civiles. Las campesinas tienen que luchar todos los días por su autonomía corporal dentro y fuera del lugar de trabajo. Esta decisión se suma a las barreras ya existentes que impiden que las campesinas tengan acceso a la salud reproductiva”, dijo Mily Treviño-Sauceda, Directora Ejecutiva de Alianza Nacional de Campesinas.

“Trigger laws” o leyes de activación ya han entrado en vigor en estados como Kentucky, Luisiana y Dakota del Sur. De acuerdo con estas leyes, tras la anulación de Roe v Wade, las clínicas que realizan abortos deben parar de inmediato. En algunos estados, como Kentucky, no hay excepciones por violación o incesto. Además, otros 13 estados están a punto de prohibir el aborto

Todxs tienen el derecho a elegir lo que hacen con su propio cuerpo. Todxs merecen tener acceso a servicios de salud reproductiva asequibles. Alianza Nacional de Campesinas defiende y seguirá defendiendo con pasión la justicia reproductiva y de salud. Hacemos un llamado a la administración Biden-Harris para que actúe de inmediato para defender y proteger la libertad reproductiva y al Congreso para que codifique Roe como ley. Los derechos reproductivos y el acceso a la atención culturalmente relevante e informada sobre el trauma aún están fuera del alcance de las mujeres indocumentadas, y las campesinas inmigrantes y migrantes.